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5 cosas que no sabías que tu intestino hace por ti

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Conocer tu cuerpo puede mejorarte mucho la vida

Durante muchos años se pensó que el intestino sólo completaba la digestión de las comidas y arrastraba los desechos para ser eliminados de nuestro cuerpo. Estos últimos años se han hecho descubrimientos fascinantes sobre los diversos constituyentes, funciones y conexiones que tiene nuestro sistema digestivo con el resto del cuerpo. Lo hemos resumido para ti en este artículo.

1: Absorción de agua y nutrientes

Mucho hemos escuchado de la importancia de ayudar al intestino y sus movimientos peristálticos que hacen avanzar las heces por el sistema. Ejercicios suaves como piscina, bicicleta o caminatas, consumo de alimentos ricos en fibra y buenas cantidades de agua para evitar a toda costa el estreñimiento. (Averigua más en este artículo sobre estreñimiento y viajes).

Pero además de ejecutar esos movimientos que son imperceptibles e involuntarios (porque tienen lugar incluso mientras dormimos), el intestino va absorbiendo agua y nutrientes, siendo capaz de seleccionar lo que necesita y desechar lo que le sobra. Inteligencia natural en acción. De ahí la importancia de regular los niveles de humedad de nuestros intestinos, porque un ambiente demasiado seco o un exceso de absorción puede dar lugar a constipación.

2: El microbioma, centro de formación de tus defensas

La flora intestinal desempeña un papel importantísimo en múltiples funciones biológicas, siendo una de las principales el desarrollo del sistema inmunitario. Además, estos bichitos minúsculos pero poderosos, nos protegen de bacterias peligrosas, regulan el metabolismo y facilitan la digestión. Una salud óptima depende en gran parte de que nuestros bichitos buenos pueblen nuestro intestino y tengan bajo control a los que nos podrían perjudicar. El principio es sencillo: donde hay mucho de lo bueno no cabe lo malo.

3: Un segundo cerebro, las células de tu intestino, piensan

Parte de los últimos descubrimientos alucinantes sobre este órgano, revelan que no solo tenemos neuronas pensantes dentro del cráneo, hay un segundo cerebro en el intestino. Así es, las células del cerebro se comunican con las del intestino a través del nervio vago. Es decir, que si no estamos felices las células del cerebro lo saben y las del intestino también lo saben. Eso explica porque ante estados de estrés una de las primeras zonas que empieza a manifestar síntomas es el sistema digestivo: hinchazón, constipación, gases ¿te suena algo de esto? Otra razón más para cuidar del equilibrio de nuestro amigo interior para que funcione correctamente acudiendo cuando sea necesario a suplementos naturales o laxantes suaves.

4: Barrera de protección para adentro y para afuera

La pared intestinal consume el 40 % de la energía del cuerpo. Tiene multitud de funciones, pero las dos más importantes son permanecer abierta para que el organismo absorba los nutrientes hacia el torrente sanguíneo y actuar como barrera para proteger el cuerpo de infecciones y toxinas.

Aquí es donde entra un problema silencioso, causa de muchas enfermedades autoinmunes, conocido como intestino permeable o intestino colador. El estreñimiento severo, el estrés, la comida chatarra o infecciones por levaduras están entre las muchas causas; y la inflamación, el estreñimiento, las dermatitis, digestiones lentas, alergias, reflujo ácido y picazón entre sus síntomas.

Por supuesto será tu médico quien te ayude a identificar y diagnosticar si algo de esto te está pasando, pero mientras tanto puedes mejorar muchísimo tu digestión con ejercicio, comida sana, abundante agua y algunos suplementos.

5: Cooperación: trabajo en equipo con otros órganos

Los intestinos -el delgado y el grueso- no están aislados y no trabajan solos para el proceso de digestión, entre ellos se ayudan e intervienen en más procesos mientras nosotros estamos lavando los platos, mandando un email o viendo la tele. Juntos, estos órganos, hormonas, nervios y microbios cooperan para ayudarnos a extraer los nutrientes de lo que ingerimos y tienen una gran influencia sobre prácticamente todos los aspectos de nuestra salud.

Cuando la comida ya procesada por los demás órganos del sistema digestivo pasa del intestino delgado al grueso, la mayoría de los nutrientes ya han sido extraídos. Lo que queda permanece en el colon un tiempo más para alimentar a la gran cantidad de bacterias intestinales que viven ahí. Estos billones de inquilinos que tenemos en nuestro intestino, continúan el proceso digestivo fermentando la fibra alimentaria. Esta fermentación crea ácidos grasos que forman células del colon sanas y ayudan a protegerlo de bacterias patógenas.

Cómo colaborar con nuestras entrañas para que sean más eficientes

Además de ocuparte de tu alimentación sana, el ejercicio físico y controlar el estrés, hay más cosas que puedes hacer para ayudar a tu intestino a estar en equilibrio óptimo:

  • Busca suplementos con probióticos y consume también prebióticos (chucrut, kimchi, kéfir, yogur de cabra, vinagre de sidra de manzana, etcétera), que son el alimento de las bacterias beneficiosas.
  • Apúntate a tés e infusiones de hierbas en vez de tomar tanto café. La manzanilla, el lapacho, el cardo mariano, el diente de león, entre otras muchas harán maravillas por tu cuerpo y mente.
  • Toma colágeno. Además de todos los beneficios que tiene el colágeno en nuestro organismo que ya conocemos de anteriores artículos el colágeno forma parte importante de órganos internos (venas, arterias, pulmones, incluso intestinos y estómago) les aporta estructura y flexibilidad para que se mantengan sanos y fuertes. Además, al ser hidrolizado facilita la absorción, quitando estrés a nuestro sistema digestivo.
  • Asegúrate de tener un movimiento regular en la evacuación de tus intestinos, es importante que la comida permanezca en tu interior lo suficiente como para que tu cuerpo extraiga de ella lo que necesita, pero no demasiado como para intoxicarte con fermentaciones excesivas que no querrás en tu vida. Cada cuerpo es diferente, pero con un mínimo de una vez al día ya iríamos de maravillas. ¿Una ayudita?: Ciruelax.

Y hasta aquí este tema fascinante del intestino que ya va dejando de ser un gran desconocido para transformarse en un gran aliado de nuestra salud, si sabemos cuidarlo.

Gracias por leernos, si te gustó el artículo comenta y comparte.

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